Dar gloria a Dios entrenando y equipando sistemáticamente a líderes llamados por Dios en tres ejes de desarrollo:
Nuestro propósito en EMVIAR es preparar hombres y mujeres para ser vasos de honra, dignos de ser usados por el Señor a través de los cuales el poder y la gloria del Rey se manifestarán.
Pra. Nancy Manzewitsch
Directora General EMVIAR
directores@emviargentina.com
EMVIAR pretende levantar un altar sobre el cual el fuego del Señor pueda descender y hacer su obra en la tierra. Este altar debe componerse de piedras vivas, de hombres y mujeres con un llamado de Dios, que estén dispuestos a ofrecerse en sacrificio para buscar al Señor con todo su corazón, y para servir sin reservas al Rey Jesús y a su Reino
Miriam Cortez
Secretaria Académica EMVIAR
academico@emviargentina.com
EMVIAR ofrece con excelencia recursos espirituales, académicos y prácticos para preparar con éxito a hombres y a mujeres con el fin de desempeñarse eficazmente en el Reino de Dios, ser canales de avivamiento, y así cumplir con la Gran Comisión en el lugar donde Dios los establezca y manifiesten su Reino en poder y gloria.
Es nuestro deseo que cuando los estudiantes cumplan su período de entrenamiento en EMVIAR estén equipados para caminar en intimidad con el Señor, compartir la palabra de Dios con denuedo, verdad y exactitud, ocupar lugares de relevancia en el Reino de Dios y ser agentes de transformación en la sociedad.
Deseamos que nuestros estudiantes puedan también operar con poder en los dones del Espíritu Santo, sirviendo a su iglesia local, las misiones, o en el lugar donde Dios los quiera plantar en su Reino.
El aspirante a ingresar a EMVIAR debe ser un hombre o mujer que ha sentido un genuino llamado de Dios a servir en tres dimensiones:
El estudiante debe estar comprometido con un ministerio local y bajo autoridad espiritual.
Somos EMVIAR, una Casa de Estudio con el fin de: “crecer en sabiduría, en estatura y en gracia para con Dios y los hombres” Lucas 2:52 … “hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo”. Efesios 4:13
Que nada detenga el crecimiento. Por eso, en esta temporada te ofrecemos: